CÝCLOS, CIRCUS
Kύκλος/ Kýklos, en griego “círculo”. Los helenos habían observado el carácter circular de la vida, como el sucederse de los días y las noches, el sucederse de las estaciones creando un eterno retorno, un anillo, es decir, un año. Es el movimiento cíclico de las cosas, sometidos a los ciclos naturales.
La raíz ha sido de gran productividad, tanto en griego como en latín (circus). Y así tenemos el ciclón, viento huracanado que forma grandes círculos en su evolución, y el anticiclón o área donde la presión barométrica es mucho mayor que en las circundantes. La bici y la moto, de bicicleta (“dos ruedas”) y motocicleta (bicicleta con motor), sin olvidar el ciclomotor, que darán lugar a deportes como el ciclismo o el motociclismo.
Los cíclopes son aquellos seres gigantescos que tenían un solo “ojo circular” en la frente; a los cuales se atribuye la construcción de determinadas murallas como las de Micenas o Tirinte, que por el tamaño de sus piedras sólo ellos pudieron mover, legándonos una construcciones ciclópeas.
Las islas Cícladas se disponen en el mar Egeo en forma de círculo. La enciclopedia es “la reunión de niños sentados en círculos” (en-kýklo-paideía) para aprender todo tipo de saberes.. De ahí el saber enciclopédico y la famosa Encicliopedia de Diderot y D ´Alambert, con información sobre todos los saberes de la época, realizada en XVII volúmenes más XI ilustraciones, que tanto influyó en su momento. Hoy día nos hemos quedado con el final de la palabra: Wikipedia.
La encíclica es la carta que envía alguien (Hoy se aplica casi exclusivamente a los papas) para que circule por las distintas comunidades o grupos de personas, es decir, el antecedente de las circulares.
Los debates políticos se llevan a cabo en el hemiciclo del Congreso, el espacio semicircular donde se reúnen los diputados. Así era la forma de los teatros romanos. El arco de herradura se define como extrasemicircular, es decir, algo más de 180 grados, como la cavea o graderío de los teatros griegos.
Del latín circus tenemos circo en todas sus acepciones: circos glaciares, lugar donde se celebraban carreras de caballos en Roma o el lugar de espectáculos variados, denominados circenses, así denominados por la forma de su recinto.
De carro (currus) que corre por el circo el latín vulgar crea currale, circo de carreras, de donde tenemos en español corro, corral, acorralar, que es cercar (poner cerco) a un animal o a una persona.
El diminutivo círculo es más usado, como figura geométrica o como reunión de personas, a partir de la forma en que se sientan. En latín existe el verbo circular con el sentido de “murmurar”, “charlar”, cuyo primer significado es “formar corrillos, círculos para hablar”, significado que se ha conservado en español: “circular un rumor, una habladuría”.
La ciclotimia es el estado mental caracterizado por alternativas de exaltación y depresión del ánimo.
Para dibujar el círculo perfecto los latinos inventaron el circinus, el “compás”, con el que marcaban en la piedra u otras superficies. De ahí, cercenar, cortar una superficie mediante un compás o en círculo, y cortar algo a cercén, que es “enteramente y en círculo”.
Mantenemos el circuito y el menos conocido circuir, estar alrededor de una cosa.
Compuestos de circum- : circunvalación de los vehículos, circuncisión (“acción de cortar circularmente una porción de prepucio”), circunferencia, circumpolar (alrededor de los polos), circunstancia (lo que se sitúa alrededor de uno).
Zarcillo viene de circellius, círculo pequeño, pendiente en forma de aro.
Circunspección es la cualidad del hombre reservado que mira a su alrededor antes de hablar.
