El Comité Educativo avanza un plan de bienestar emocional para reducir la influencia de la pandemia en la comunidad escolar
El conselleiro de Educación, Román Rodríguez, explicó que este documento pondrá a disposición de alumnado y profesorado las pautas y herramientas necesarias para velar por la estabilidad emocional en un curso escolar marcado por la covid
También se aprobó que, mientras dure el cierre de la hostelería, los institutos puedan habilitar espacios para el consumo de alimentos, cumpliendo las normas de seguridad, para aquellos alumnos que no pueden volver a sus domicilios
Se dio el visto bueno definitivo al Plan de Atención al Alumnado Vulnerable, con el apoyo de 4.000 especialistas para garantizar el proceso educativo en todos los contextos
A falta del texto final, pondrá a disposición de estudiantes y profesorado una serie de herramientas y pautas dirigidas a afrontar con éxito los contextos adversos como es el caso actual con la covid. Es decir, proporcionar un conjunto de recursos que ayuden a profesores, alumnos y familias a convivir con esta situación de incertidumbre y a conseguir que no influya negativamente en la convivencia de los centros y en los resultados académicos.
Según Román Rodríguez, "la capacidad para abordar este tipo de situaciones repercute de manera directa en el proceso de aprendizaje", de ahí la necesidad de contar con una estrategia de atención y profesionales bien formados que, codo a codo con los alumnos, sean capaces de convertir situaciones adversas en oportunidades de mejora a nivel personal y a nivel del sistema.
"Esta pandemia -subrayó el conselleiro- puso de manifiesto que, como sociedad, tenemos mucho que aprender del nivel de responsabilidad y de la capacidad de organización y de adaptación de los alumnos y de los profesores".
Análisis de la evolución de casos
Según el conselleiro, todos ellos dieron ejemplo durante el primer trimestre del curso, "y lo vuelven a dar en estas semanas duras". Se refiere así a la dinámica de casos en los centros educativos, que esta semana está doblegando la curva "gracias a la absoluta responsabilidad" de los centros educativos. Según los datos epidemiológicos, esta es la primera semana tras la Navidad en la que la curva empieza a descender. Con todo, el conselleiro señaló que las cifras globales son aún altas, en la línea de las del conjunto de la sociedad, por lo que es imprescindible seguir cumpliendo con los protocolos y medidas.
Atención de peticiones recibidas
Por otro lado, a petición de la comunidad educativa, se elevó al Comité de hoy un borrador de instrucción para que, mientras dure el cierre de los servicios de hostelería, los alumnos de los IES y CIFPs que no pueden regresar a su domicilio entre turno y turno puedan disponer de un espacio acomodado de comer. Se trata de una petición trasladada precisamente por miembros del Comité Educativo en la anterior reunión.
Así, se evaluó que los centros podrán habilitar un espacio provisional destinado al consumo de alimentos. Este espacio deber disponer de ventilación natural y ser suficientemente amplio para garantizar la distancia de seguridad de al menos 1,5 metros. Además, el consumo de alimentos deberá ser individual y el uso de la máscara obligatorio salvo en el momento efectivo de ingerir el alimento.
Igualdad de condiciones
Asimismo, el Comité Educativo dio luz verde al texto definitivo del Plan de atención al Alumnado Vulnerable, que había sido avanzado en la reunión de la semana pasada. Así, a partir de ahora, el sistema educativo gallego dispone de una hoja de ruta clara, con procedimientos organizados y recursos específicos para garantizar la atención educativa a este alumnado en igualdad de condiciones que sus compañeros, en caso de que la evolución de la pandemia exigiera el paso a la enseñanza no presencial.
Para ello, el Gobierno autonómico dispone de una red de 4.000 especialistas de apoyo a estos alumnos, que serían los encargados de atender a estos niños en modo telemático, si fuese el caso, siempre bajo la supervisión de los tutores.
El documento establece que, siempre que sea posible, el trabajo de estos alumnos se integrará en el aula virtual del centro y, con el apoyo de los especialistas, se favorecerán las rutinas de trabajo así como el contacto, la interacción y la participación diaria con su grupo de compañeros. Se fija también la necesaria preparación de estos niños para la enseñanza virtual, con formación y entrenamiento previo en las sesiones presenciales.