La temperatura

La temperatura es una propiedad de los cuerpos que puede variar según las condiciones del entorno. Si ponemos en contacto dos cuerpos a diferente temperatura, el que está a más temperatura cede calor hacia el otro, de modo que el que está a más temperatura se enfría y el que estaba a menos temperatura se calienta, hasta quedar ambos a la misma.

Esto, que puede sonarte complicado, es lo que haces cuando coges una taza de leche caliente entre las manos para calentártelas, o cuando coges una lata de refresco fría del frigorífico y después de sujetarla un rato, la lata se ha calentado y tu mano se ha enfriado.

Esta propiedad de transferencia de calor entre los cuerpos es vital en la cocina. Veamos alguna de las situaciones donde esto sucede:

• Al introducir un alimento caliente en el frigorífico, la temperatura de este subiría (para intentar igualarse con la del alimento) y eso podría afectar a la conservación de los alimentos que hay en él.
• Al congelar un alimento, el tiempo que tarde en llegar a la congelación dependerá, entre otras cosas de la temperatura a la que lo introduzcamos.
• ¡COCINAR! Cuando cocinamos un alimento, lo que estamos haciendo es transmitirle calor. Los diferentes métodos que utilicemos para transmitir ese calor al alimento, serán los diferentes métodos de cocinado.