El IVA

Un impuesto es un tributo que se paga a las Administraciones Públicas (Estado, Comunidad Autónoma, Diputación Provincial, Ayuntamiento,...) para que esta puedan soportar los gastos públicos.

Las Administraciones Públicas, que como acabas de leer son el Estado, la Comunidad Autónoma, la Diputación Provincial o tu Ayuntamiento recaudan de sus habitantes el dinero con el que mantener los servicios públicos que de ellas dependen (por ejemplo: los colegios, los hospitales, las carreteras, etc.) Este dinero lo recaudan a través de los impuestos.

El tema de los impuestos es muy amplio y complejo, pero hay una clasificación que seguro que entiendes fácilmente: impuestos directos e indirectos.

• Impuestos directos: son aquellos que la Administración recauda por el dinero que ingresas (por ejemplo, tu sueldo) o por el patrimonio que tienes (por ejemplo, tu casa).
• Impuestos indirectos: son aquellos que la Administración recauda cuando compras o vendes algo (por ejemplo, al vender un piso o al comprar una barra de pan). Los impuestos indirectos son generalmente una parte (%) del valor de lo que se compra o vende.

El IVA, según la clasificación anterior es un impuesto indirecto, que pagamos cada vez que compramos algo (una lata de refresco, una sudadera, un juego de la consola,...) o recibimos un servicio (nos cortan el pelo, nos arreglan el teléfono,...)